TEMAS Y PREOCUPACIONES DE
CARÁCTER SOCIAL Y DEL ENTORNO NATURAL
La naturaleza
ha tenido diferentes funciones a lo largo de la historia del arte. Ha servido a
los artistas como fuente de inspiración desde siempre, así sea para crear un fondo
que acompañe la escena principal de la obra has convertirse en la
representación principal de ella como medio de expresión de ideas y emociones.
En esta lección
veremos cuando el entorno pasa de ser fuente de inspiración y representación a
fuente de concientización y parte de la obra misma.
Los artistas no
son ajenos a los problemas que surgen en su entorno y hacen consciente de su
papel como transmisores o portavoces de la sociedad. Muchos de ellos tratan de
que, por medio de sus obras, se despierte una consciencia y en el mejor de los
casos, se logre una acción. Así, el arte se convierte en una herramienta eficaz
para denunciar lo que no vemos, o más bien, lo que no queremos ver y que nos
afecta como sociedad.
Es así como
surgen movimientos artísticos que buscan despertar conciencias no sólo del
entorno natural si no de aspectos, que al parecer de los artistas, están
afectando a la sociedad en general como lo fue en su momento el arte pop (Pop
Art) que surgió en los años cincuenta en los años cincuenta en Estados Unidos
de América y cuyas obras se caracterizaron por hacer una crítica a los
productos de consumo masivo y cuestionaban la gran influencia que tenían los
medios de comunicación sobre la sociedad, haciendo que perdieran sus juicios
personales.
El llamado Land
Art (en español sería “arte de la tierra”) es otro movimiento que surge en los
años setenta presentando una aguda visión de la relación del hombre con la
naturaleza.
Este arte busca
denunciar por medio de intervenciones hechas directamente en la naturaleza,
como el hombre al querer dominarla, controlarla, someterla y explotarla ha roto
el equilibrio de su relación con ella. En alguna medida, el progreso desmedido
es responsable de romper con esta armonía y los artistas tratan de hacerlo
evidente con sus obras al expresar cómo la naturaleza ha dejado de ser un
espacio sagrado para pasar a ser un espacio dominado y destruido por el hombre,
quien no se da cuenta de su fragilidad.
Las obras de
uno de los representantes más famosos del Land Art, Christo (Bulgaria, 1935),
son de tal magnitud, que en ocasiones llega a ser necesario subirse a una
avioneta para poderlas apreciar en su totalidad.
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